¿Quién fija el precio de los medicamentos en España?
En España, es el Estado el que se encarga de fijar el precio de los medicamentos que se incluyen en la prestación pública, concretamente la Comisión Interministerial de Precios de Medicamentos.
¿Cómo se desarrolla el proceso de fijación de precio de los medicamentos?
La empresa farmacéutica presenta una solicitud de precio y reembolso a la Dirección General de Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia. Se realiza un informe y análisis sobre esta solicitud con toda la información y la Comisión Interministerial de Precios dictamina sobre la financiación pública y el precio en cada caso sobre la base de ese informe elaborado por la Subdirección General competente.
Criterios para determinar el precio de los medicamentos:
La Ley de Garantías y Uso Racional de los Medicamentos y Productos Sanitarios, fija las condiciones y criterios que afectan a la determinación del precio de los medicamentos. En resumen, estos son los siguientes:
- La gravedad, duración y secuelas de las distintas patologías para las que resulten indicados los medicamentos.
- Valorar y respetar las necesidades específicas de ciertos colectivos.
- El valor terapéutico y social del medicamento y beneficio del mismo teniendo en cuenta su relación coste-efectividad.
- Racionalización del gasto público destinado a prestación farmacéutica e impacto presupuestario en el Sistema Nacional de Salud.
- Existencia de medicamentos u otras alternativas terapéuticas para las mismas afecciones a menor precio o inferior coste de tratamiento.
- Grado de innovación del medicamento.
Los medicamentos caros
Hay medicamentos que son caros debido a su innovación y eficacia, ya que el precio debe garantizar ciertos resultados que compensen la inversión de la empresa farmacéutica que investiga.
Los gastos en i+D+I son elevados y tienen un riesgo muy elevado. El coste de crear un medicamento puede ascender a 2.400 millones. Además, sólo tres de cada diez medicamentos comercializados logran generar resultados suficientes como para compensar la inversión.